El origen

Instante Oscuro nació como fruto de un fuerte impulso a animarme a mostrar mis fotografías al mundo.

Durante más de 15 años acumulé imágenes que no había mostrado a nadie, y de repente, con el empuje adecuado, tomé coraje para cambiar esa situación, para compartir mi manera de expresarme, para exhibir lo que tengo para dar.

El primer desafío fue darle nombre al proyecto. Lo Que el Ojo No Ve, nos recuerda que en realidad el instante de la fotografía ocurre en ese preciso momento cuasi mágico en el que no podemos ver. Al levantarse el espejo cuando el obturador dispara, la luz es brindada a la cámara y no a nosotros. Es por eso que siempre hay algo de sorpresa, de magia, en la fotografía que logramos. Podemos estudiar el encuadre, la luz, y esperar el momento adecuado, pero siempre siempre, el click es a ciegas.

Luego recordé lo aburrido que me resultan los blogs de fotografía.
Y decidí que cada nueva entrada tuviera un hilo conductor, un relato, una historia o un sentimiento, acompañando las imágenes. 
Como escribir no es mi fuerte -citando al gran Avedon: “A través de mis fotografía puedo hablar de manera más intrincada y profunda que a través de las palabras.”- tomé prestados textos que expresaran lo que buscaba.

Después vinieron las exposiciones, la prueba de fuego a mí misma. Y no sólo quedé conforme con lo que dí de mí, sino que crecieron las ganas de seguir exponiendo. 

Hoy puedo decir: Soy fotógrafa.

Y así llegamos al presente, buscando mejorar, explorar, ir más allá, con cada imagen, y cada día más segura de que ese es el camino.




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